Parda es una dupla creativa de dirección y producción. La conforman Miche, como directora, y Sol Purriños, como productora. 

Producen, realizan y reflexionan en torno a los videoclips con una mirada plástica y sensible.

Sus videos tienen una estética e identidad reconocible. Imágenes y narrativas sensoriales que transmiten desde lo simple, lo cercano y desde una perspectiva queer y feminista.

Parda nació de manera orgánica. En “Última Habitación”, su primer rodaje juntas, Sol y Miche sintieron algo único en la manera de potenciarse creativamente. Sabían que era algo inusual y querían explorarlo, así que comenzaron a trabajar juntas.

Después de dos años les pareció momento de darle nombre y forma a eso que ya estaba sucediendo naturalmente entre ellas.

Entonces nació Parda. 

“Buscábamos palabras de la lunfa argentina y cuando apareció Parda nos gustó su fuerza, bien visual. La textura en el pelo de un animal salvaje. Nos pareció que evocaba nuestra manera de acercarnos a las imágenes: íntimas y sensoriales, como si las respiráramos bien de cerca. Más tarde nos contaron que al empate en el truco se le llama pardas, y algo de eso funcionaba bien para nombrar una dupla”.

¿Cuándo nace la necesidad de armar una dupla de producción y dirección?

Parda: No lo planeamos, pero cada proyecto que llegaba renovaba el deseo de trabajar juntas. Mientras más filmamos, más sentido tuvo enfrentar la responsabilidad y el riesgo como pares. Es una cuestión de retroalimentación. Unx directorx necesita quien ponga cuerpo a sus ideas, y unx productorx, ideas para materializar. La dupla aparece para dar entidad a esta sinergia entre nosotras, permitiéndonos crear un espacio donde convivan las piezas del universo sensorial que estábamos creando.

¿Piensan que como dupla van a crear una nueva identidad o su idea es profundizar en lo que ya venía construyendo cada una por su cuenta?

Parda: Nuestra dupla —aunque antes sin nombre— está activa hace un par de años. Entonces la búsqueda identitaria ya está en proceso, para nosotras se trata de seguir profundizando el camino que venimos trazando.

Por supuesto que como dupla hay algo de la identidad individual que pasa a ser una identidad colectiva, y eso nos lleva inevitablemente a seguir afianzando la confianza en el trabajo de la otra, para ir encarando propuestas que presenten nuevos desafíos.

De todas formas, no somos monógamas. Nos unimos para filmar música pero cada una tiene sus proyectos por fuera. Por ejemplo, Miche dirige publicidad en Rebolución y Sol tiene su productora de cine, Libero Films.

¿De qué manera trabajan en relación a su perspectiva queer, feminista, social y sexual en producciones más pequeñas o más grandes? Debe ser diferente trabajar con Los Besos o con J Mena pero ambas experiencias son super interesantes y provechosas en su diversidad. ¿Varía la independencia o comodidad que tienen en estas producciones a la hora de crear, o más bien, en relación a lo ideológico? Es decir, ¿de qué manera se puede adaptar su ideología a estos ámbitos distintos?

Parda: Siempre buscamos que nuestro trabajo salga de un lugar íntimo y real, y es tal vez por eso que termina siendo representativo de nuestros valores y nuestra manera de ver el mundo. Somos dos mujeres con perspectiva de género y social; nos atraviesa la diversidad sexual y afectiva. Son temas importantes para nosotras, que atraviesan nuestra manera de ver y contar el mundo que nos rodea.

Cuando desarrollamos “Una Historia de Los Besos”, Paula Trama se refirió a “Destino” como un himno al amor entre mujeres. Empezamos a pensar en conjunto como ampliar ese himno para que no le hablase solo a las mujeres cis. Entramos por la idea del placard y terminamos contando la historia de Lara, que en ese momento estaba explorando su transición. “Destino” se convirtió en una historia de amor con ella misma.

En el caso de J Mena, ella vino con ganas de hablar de una relación tóxica. Eso traía aparejada una enorme responsabilidad, porque ella tiene una llegada multitudinaria y eso nos obligaba a prestar especial atención a lo que íbamos a mostrar y como. Trabajamos duro y en conjunto sobre todos los detalles, desde cómo interactuaban su cuerpo con el de su partenaire a cómo podían leerse los episodios de la pareja representados en los recuerdos. No queríamos sangre, golpes, ni que se borrase por un instante la línea entre una relación tóxica y un episodio de violencia de género.

Lo que intentamos es trabajar cada pieza con responsabilidad como comunicadoras, y que todo lo que filmemos se vea transformado por nuestra manera de ver el mundo.

Sol, en tu Instagram te referís al trabajo de dirección y producción en Parda como un ir de “lo abstracto a lo concreto”. ¿Cómo piensan esto cada una en su rol y en conjunto como dupla?

Sol: Hay algo muy especial que tiene el trabajar con las ideas. Se empieza con un diálogo que es abstracto, que es intangible. En nuestra dinámica de trabajo logramos un entendimiento intrínseco de ese diálogo de la invisibilidad que tienen las ideas. En el resultado termina apareciendo un mensaje, que luego tenemos que comunicar a un equipo de trabajo. Que como consecuencia termina generando algo concreto. Es un acto mágico. Y eso es algo fascinante. En mi rol como productora yo me siento responsable de la concreción de esa invisibilidad.

La producción me empezó a interesar porque sabía que era la manera de llevar a cabo mis propias ideas. La manera más concreta de que esos sueños tocaran la tierra. 

Miche: Creo que mi manera de pensar la dirección está bastante atravesada por una mirada de cómo producir; y a la vez, el acercamiento que tiene Sol a la producción es profundamente creativo. Las dos tenemos la energía puesta en que la manera de filmar sea fiel a la idea.

Y eso es importantísimo, porque al principio solo hay una imagen madre que aparece cuando escucho una canción. Tengo que ser muy cuidadosa de no perderla mientras la bajo a tierra. Tiene que haber una confianza en el entendimiento del otro sobre algo tan intangible. En que va a saber interpretar esa esencia y mantenerla viva mientras vas dándole forma.

¿Porqué son importantes los videoclips para ustedes? 

Parda: Lo más hermoso de los videoclips es la posibilidad de crear un universo sensorial totalmente nuevo. La propuesta inicial, la música, ya está ahí. Pero lo que traes a nivel imagen termina de crear el mundo alrededor, esas dos ideas quedan atadas para siempre.

La percepción o lectura sobre la música se va a teñir por la imagen que la acompaña; y la imagen nos permite explorar de forma paralela las emociones y sensaciones que trae cada canción.

Pero esta especie de montaje dialéctico (tesis + antítesis = síntesis) es una consecuencia única de la unión entre dos artistas. La misma canción filmada por dos directorxs diferentes terminaría en videoclips totalmente distintos. Las imágenes que la música despierta en cada unx de nosotrxs es única.

Sol: El mundo de los videoclips me empezó a llamar la atención, porque sentía que era una forma de seguir expresándome audiovisualmente, en un período de producción más acotado, en procesos más cortos que los cinematográficos, y con el elemento musical cómo centro, que es otro de los amores de mi vida.

Dirigí algunos videoclips, y cuando la conocí a Miche, sus ideas y su proceso creativo me cautivaron. Tuve un deseo instantáneo de formar parte en la realización de dichas ideas, aportando no solo mi creatividad, sino también mi creatividad productiva.

¿En qué se inspiran a la hora de pensar y crear los videoclips? A nivel estético e identitario. Miche, por ejemplo, en tus videos se repite esto tan bello de que a través de una imagen simple se transmiten un montón de emociones (un super primer plano de un pecho, una imagen fija de una estatua, etc).

Miche: En mi caso es un proceso muy íntimo, que siempre parte del mismo ritual: escuchar el tema una o dos veces e intentar capturar en una imagen la sensación que transmite. Puede ser una textura, un plano, una idea, o incluso un clima a evocar.

Después trato de ir tirando del hilo para encontrar una progresión, no me obsesionan necesariamente las historias o lo narrativo, pero sí la noción de que lo que comienza de una manera debe terminar de otra. Que en el video debe suceder una transformación que, por pequeña que sea, resulte irreversible.

Mi intención es que al final del camino, cuando un espectador se siente a ver ese video, tal vez hasta escuche el tema por primera vez, sienta algo de lo que yo experimente durante esa primera escucha.

Pensando en la escena audiovisual contemporánea, ¿qué es lo que más les interesa de lo que se ve hoy en día?

Parda: Nos interesan los videos que nos cautivan, que traen un estímulo distinto. A veces es la luz o el tono, a veces es un plano. Hay un no se qué que te impide sacar los ojos de la pantalla desde que un video empieza hasta que termina. El punto justo entre provocar un extrañamiento y evocar un sentimiento familiar.

El abanico es tan amplio como diverso: desde “Love Again”, de Dua Lipa o “Planeta Rojo”, de Dinastía hasta el Tiny Desk de C. Tangana.

¿Con qué otrxs artistas les gustaría trabajar? ¿De qué manera?

Parda: Un montón de artistas. Lo que más nos interesa es explorar distintos estímulos sonoros. 

Veníamos trabajando con artistas super indies y la experiencia con J Mena trajo una información distinta desde lo audiovisual. Así que queremos seguir probando, desde incursionar en el género urbano con artistas como Lara 91k hasta artistas más pop como Lali. También queremos abrirnos a trabajar con artistas de otros países, por ejemplo, Mori u otros referentes de la escena bedroom pop en España.

Pero también nos interesa buscar co-direcciones con otrxs directorxs. En el caso de “Ya No Te Extraño” trabajamos con Geraldine Baron y fue una experiencia muy enriquecedora para el videoclip, pero también para nosotras como dupla.

¿Quiénes son sus referentes en la dirección y producción de videoclips?

Parda: De afuera: Ugo Mangin, Little Spain, Axel Byrfors, Ama Lou, Pedro Artola.

De acá: Hernan Corera, Carmen Rivoira y Josefina Alen, La Casa de Al Lado, Tomas Terzano, Orco Videos.

Lo lindo de la escena acá es que tus referentes son también tus colegas y a veces, tus amigxs. Solemos trabajar mucho con otros directores y productores y eso trae un aire de camaradería. Nos involucramos en otros proyectos y queremos verlos crecer, aprendemos mucho trabajando con ellos.

Parda Filma
Backstage del rodaje de La Colmena - Mal Bicho (2020)
 
Conocé más sobre la dupla en vimeo.com/parda
 
Miche Es realizadora cinematográfica en la ENERC y se formó profesionalmente en el oficio de montaje. Editó más de 50 piezas entre largometrajes, cortometrajes, comerciales, videoclips y fashion films que le permitieron desarrollar una aguda concepción del ritmo y corte fino que definen su visión de directora. Sus cortometrajes formaron parte de la selección oficial de festivales como Clermont Ferrand, el Festival Iberoamericano de Huelva y el Internacional de Madrid.

Sol Purriños se formó como realizadora de cine en la UBA y en el CIC. En 2016 fundó Libero Films, donde produce películas seleccionadas en diversos festivales internacionales, tales como Varsovia, Girona y Philadelphia, entre otros. Filmó cortometrajes, series y dos largometrajes (ambos con fecha para estreno internacional). Paralelamente al cine, continuó su carrera como productora y directora dentro del mundo publicitario, en donde comenzó a filmar video musicales y piezas publicitarias.

Miche y Sol Purriños conforman Parda
 
Por/ Caro Mazzaferro
Carolina Mazzaferro escribe, dirige y actúa. Licenciada en Actuación (UNA) y Diplomada en Dramaturgia (UBA). Escribió y dirigió la obra Desnudez (2018-2019) que realizó funciones en el Teatro Anfitrión, fue seleccionada para participar del Festival Fauna en el CC San Martín y está próxima a publicarse en el libro “Voces Trasandinas: antología de dramaturgas emergentes de Chile y Argentina”. Además dicta talleres de escritura creativa, y, junto a La ladrona de libros, dictan el taller “Nunca son escritores”, encuentros sobre dramaturgas y poetas a lo largo de la historia.

Actualmente es la encargada de redes de Filmar Música.

CAROLINA MAZZAFERRO

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